lunes, 21 de julio de 2025

CUANDO A EULALIA “LA TRAPERA” SE LE APARECIÓ EN CASA SU HIJO MUERTO.





CUANDO A EULALIA “LA TRAPERA” SE LE APARECIÓ EN CASA SU HIJO MUERTO (el que lleva en brazos en esta foto, el Alejandro "e pototipo da elegancia" como le bautizó un vecino allá por la dura posguerra de una "vetusta", "olvidada", pero "entrañable" ciudad de "esta tierra que es Aragón" que es Huesca, Güesqueta)


Hoy es 21 de julio y hace mucho calor. 
 
El 21 de julio de 1983

Todos tenemos en nuestra vida fechas para recordar y fechas para olvidar, y quien diga lo contrario o miente o tiene poca memoria.
 
En mi caso el 21 de julio si hace mucha calor me pongo de mal genio y me viene al paladar sabor a carbón, y eso me pasa desde 1983. Recuerdo como si hubiera sido hace un segundo que eran las 13,30 del 21 de julio de 1983 y en la calle San Vicente de Paúl no se podía estar por la canícula que pegaba de aire sahariano. Llevaba yo un cabreo de campeonato. Me estaba preparando para ir a trabajar pues había cambiado el turno y me tocaba de tardes. Me estaba comiendo unas "lentejas a la carbonara". ¿Que cómo son las lentejas a la carbonara? Pues son lentejas hechas el día de antes con olla exprés y calentadas con prisas sin tener la precaución de mirar no vaya a ser que las lentejas se hayan quedado sin agua y se quemen al calentarlas. Así fue, lentejas "con carbón". Para colmo de cabreos pasó una ambulancia con las sirenas a todo volumen en servicio de urgencias, y eso me sacó aún más de mis casillas, que tampoco hace falta mucho para eso.